Sonidos y música en Game Maker Studio
Sabemos que los sonidos son un recurso muy importante en los videojuegos, ya que aportan una riqueza que complementan a los gráficos que podamos crear. Es por eso que vemos últimamente muchos estudios indies que aportan la banda sonora del juego que crean, además que esta música y sus efectos son creados por profesionales o gente especializada. Lo dicho, un buen apartado sonoro aumentará la calidad final de nuestro juego.
Vamos a aprender como añadir estos recursos a nuestro proyecto de Game Maker Studio. Para añadir un sonido, podemos ir a nuestro árbol de recurso, botón derecho, a la barra de herramientas o al menú Resource – Create Sound. Cualquiera de estas opciones abrirá la siguiente ventana:
Cargaremos un fichero de sonido con el botón Load Sound, dónde aparecerá una ventana para seleccionar el archivo de sonido. Los ficheros soportados son ficheros con extensión WAV o MP3. Habitualmente, los ficheros WAV se utilizan como efectos de sonido, mientras que los ficheros MP3 se utilizan como música de fondo, ya que Game Maker solo permite una a la vez. Aunque utilizar unos u otros da un poco igual, hay que tener en cuenta que los ficheros MP3 tienen más proceso de CPU, ya que tienen que ser descodificados, mientras que los archivos WAV se pueden ejecutar instantáneamente.
Una vez que tengamos cargado el fichero, veremos su ruta actual cuando lo hayamos hecho, podemos reproducirlo con el botón correspondiente. La reproducción se repetirá infinitamente, hasta que la paremos con su botón correspondiente. También tenemos la posibilidad de cambiarle el volumen si lo creemos necesario, aunque ahora explicaremos las otras características en detalle.
Grupos de audio
Al igual que con los sprites, Game Maker Studio permite recientemente asignar un sonido a un grupo. específico. La diferencia es que con los sprites la carga se hace automática, y aquí tenemos funciones específicas para gestionar nosotros que ficheros cargamos o liberamos para hacer más eficiente la memoria. Todas estas opciones solo están para las versiones de pago de Game Maker.
Compresión
Todas las opciones que hemos visto ahora son para los ficheros de audio sin comprimir. Sin embargo, podemos comprimir el audio si nos interesa. De esta manera, comprimiremos todos nuestros ficheros a formato ogg. Estos ficheros ocupan muy poco espacio en disco y son ideales a la hora de distribuir nuestro juego.
Streaming
Si hemos elegido audio comprimido, podremos personalizarlo si lo queremos en streaming o no. Un sonido streaming se carga y se ejecuta en tiempo real desde el disco. Esta opción es ideal para la música de fondo, aunque puede ocasionar que el juego se pause por la carga del fichero, por eso no es recomendable para efectos de sonido que no necesitan mucho proceso y pueden cargarse fácilmente en memoria.
Calidad y volumen
Si hemos cargado un fichero OGG o MP3, aparecerá un control deslizante para cambiar la calidad de codificación, por lo tanto repercutirá en el sonido final. Como es obvio, cuanta más calidad le pongamos más ocupará el fichero, y aumentar la calidad en un fichero que no la tenga no mejorará notablemente el juego, además de hacerlo crecer inútilmente.
También podremos ajustar el volumen del sonido, aunque existen funciones para poder hacerlas mientras ejecutamos el juego.
Opciones de destino
En esta sección definimos la conversión del fichero final para nuestro juego. Ajustando estas opciones, Game Maker comprimirá los ficheros con estos parámetros. La configuración que se recomienda por defecto es 16 bits, 44100 KHZ y 192 kbps, aunque podemos cambiar cualquiera de estos parámetros para reducir el tamaño del audio. Desde aquí también podemos configurar si el sonido es en 3D, importante si queremos usar este tipo de funciones en nuestro juego.
Programa externo para editar sonido
Game Maker no tiene un editor de sonidos propio, al igual que con los sprites que podemos editar muchas opciones, así que si queremos editar algún fichero de audio hay que hacerlo con un programa externo. Recordad que en las Preferencias del programa podemos asignarle uno, para que cuando le demos al botón Edit Sound abra el programa directamente. Todos los cambios que hagamos en ese programa hay que guardarlos para que quede recogido en nuestro proyecto.
Un programa externo que recomiendo, además de gratuito, es Audacity. Podemos cambiar muchas opciones de nuestro audio, cortar, seleccionar, subir de volumen, etc. En un futuro ya explicaremos como utilizar este programa en Recursos.